Un ordenador de escritorio se define como un ordenador personal diseñado para ser utilizado en un lugar específico, por lo regular un escritorio en una habitación destinada para el uso común o personal.
Originalmente, este tipo de ordenadores han sido vistos como una versión más pequeña de un ordenador, y por lo general, de equipos que requieren una gran cantidad de espacio para su funcionamiento dentro de un mobiliario de oficina especialmente diseñado.
En la actualidad, un equipo de escritorio es considerado como un elemento grande, pero en realidad, en comparación con su pasado los ordenadores han llegado a ser increíblemente pequeños.
Las computadoras de escritorio tradicionalmente poseen un diseño bastante específico y determinado. Este tipo de equipo, que contiene casi la mayoría de los componentes de un ordenador normal, tales como la CPU, el disco duro y la memoria RAM, se acomoda en una posición horizontal sobre un escritorio. El monitor generalmente se ubica en la parte superior de la torre de la computadora, a la cual se le anexan elementos externos como el ratón y el teclado.
Por mucho tiempo, el estilo de la torre se convirtió en la forma dominante de la computadora de escritorio. También se puede acomodar la torre de la computadora de otras maneras, como debajo de un escritorio o mueble para oficina, o sobre el escritorio al lado del monitor, en vez de abajo del monitor. Las torres por lo general tienen más espacio, lo que permite tener muchos puertos de acceso para mantener elementos como discos duros y unidades para diferentes medios.
En el último tiempo se ha vuelto muy popular el ordenador Todo-en-1. Este tipo de computadores tienen el monitor incluido en el casco donde se ubican los demás componentes, pero el ratón y el teclado siguen siendo elementos externos.
Históricamente, los computadores de escritorio han sido más populares que los ordenadores portátiles, esto se debe a diferentes razones. Por un lado, puesto que las partes son más comunes, los ordenadores de escritorio suelen ser más baratos que los portátiles; aunque esta diferencia de precios se ha reducido en los últimos años, de tal manera, las computadoras portátiles se han ido convertido progresivamente en una opción mucho más popular.
Aún siguen siendo capaces de integrar los componentes más potentes que un ordenador portátil de la misma generación, por lo que son la opción recomendada para elaborar tareas de alto rendimiento, tales como edición de vídeo y sonido, diseño y juegos.
Originalmente, este tipo de ordenadores han sido vistos como una versión más pequeña de un ordenador, y por lo general, de equipos que requieren una gran cantidad de espacio para su funcionamiento dentro de un mobiliario de oficina especialmente diseñado.
En la actualidad, un equipo de escritorio es considerado como un elemento grande, pero en realidad, en comparación con su pasado los ordenadores han llegado a ser increíblemente pequeños.
Las computadoras de escritorio tradicionalmente poseen un diseño bastante específico y determinado. Este tipo de equipo, que contiene casi la mayoría de los componentes de un ordenador normal, tales como la CPU, el disco duro y la memoria RAM, se acomoda en una posición horizontal sobre un escritorio. El monitor generalmente se ubica en la parte superior de la torre de la computadora, a la cual se le anexan elementos externos como el ratón y el teclado.
Por mucho tiempo, el estilo de la torre se convirtió en la forma dominante de la computadora de escritorio. También se puede acomodar la torre de la computadora de otras maneras, como debajo de un escritorio o mueble para oficina, o sobre el escritorio al lado del monitor, en vez de abajo del monitor. Las torres por lo general tienen más espacio, lo que permite tener muchos puertos de acceso para mantener elementos como discos duros y unidades para diferentes medios.
En el último tiempo se ha vuelto muy popular el ordenador Todo-en-1. Este tipo de computadores tienen el monitor incluido en el casco donde se ubican los demás componentes, pero el ratón y el teclado siguen siendo elementos externos.
Históricamente, los computadores de escritorio han sido más populares que los ordenadores portátiles, esto se debe a diferentes razones. Por un lado, puesto que las partes son más comunes, los ordenadores de escritorio suelen ser más baratos que los portátiles; aunque esta diferencia de precios se ha reducido en los últimos años, de tal manera, las computadoras portátiles se han ido convertido progresivamente en una opción mucho más popular.
Aún siguen siendo capaces de integrar los componentes más potentes que un ordenador portátil de la misma generación, por lo que son la opción recomendada para elaborar tareas de alto rendimiento, tales como edición de vídeo y sonido, diseño y juegos.
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